Max Verstappen confesó que su desempeño en la clasificación del Gran Premio de Mónaco no fue una sorpresa para él. El piloto de Red Bull, llegó a Mónaco con la intención de ampliar su récord de ocho poles consecutivas, pero el rendimiento del coche no estuvo a la altura de sus rivales y se vio superado.
Los austriacos, han tenido muchos problemas durante todo el fin de semana, durante la primera jornada de entrenamientos libres, Verstappen manifestó algunos problemas con el coche, describiendo que rebotaba “como un canguro”. Estos problemas persistieron durante la clasificación e incluso durante su última vuelta rápida en la Q3, el neerlandés chocó contra las barreras y tuvo que abortar su vuelta, al final Max Verstappen se quedó con el sexto mejor crono. “No estoy decepcionado con la posición, estoy decepcionado con nuestro desempeño. Este resultado no fue una sorpresa para mí, porque al comenzar este fin de semana sabíamos nuestras limitantes y la situación era mala. Fue muy difícil para nosotros. Me sentí muy cómodo en las curvas de alta velocidad, pero a baja velocidad perdemos mucho, hay baches y el coche rebota. No hay mucho que puedas hacer si es una carrera sin incidentes. Los coches son tan anchos y grandes que no se puede adelantar. Intentaremos seguirles el ritmo, porque no tenemos el coche más rápido. Así que veremos qué pasa”, expresó Verstappen.
Pese a que no ha sido un buen fin de semana para Red Bull, recordando que Pérez comenzará la carrera desde la parte trasera, el actual monarca de la F1, confía en que podrá obtener un buen resultado en carrera.
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