En una entrevista exclusiva para Auto Hebdo, Ross Brawn, uno de los ingenieros más influyentes de la Fórmula 1 y gran amigo de Michael Schumacher, ha compartido reveladoras anécdotas sobre su relación con el siete veces campeón del mundo.
¿Cuándo oíste hablar de Michael por primera vez?
Brawn: “Fue antes de Benetton. Yo trabajaba en coches deportivos para Jaguar con Tom Walkinshaw en los años 80. Nos encontramos con Michael, que entonces formaba parte del equipo Mercedes. Mercedes era nuestro mayor rival. Michael ya era bastante notable. En ese momento, nos fijamos en él”. En aquel momento, normalmente había dos o tres pilotos en los coches, y Michael siempre era el más rápido. Sin embargo, había pilotos muy experimentados como Jochen Mass, que tenía experiencia en F1, y prometedores. nombres como Karl Wendlinger. “Cuando nos mudamos a Benetton con Tom, naturalmente nos interesamos por Michael”.
¿Fue Michael en los años de Benetton la base del futuro gran campeón?
Brawn: “Había una base, pero la base por sí sola no es suficiente. También se necesita talento y el talento de Michael era enorme. La historia de la Fórmula 1 está llena de pilotos que tenían un gran talento pero no podían ponerlo en práctica. Michael era diferente en En este sentido, tenía una resistencia física extraordinaria, una gran fuerza. “Tenía un poder de concentración y una dedicación increíble. Tenía todas las cualidades necesarias. No tenía mucha experiencia porque entró en el Grupo C después de la F3, pero podía. seguir los pasos gracias a su inteligencia.”
Si no fuera por Michael, ¿habría aceptado la oferta de Jean Todt de unirse a Ferrari?
Brawn: “Para ser honesto, tuve la oportunidad de unirme a Ferrari con Michael a finales de 1995. El director técnico de Ferrari en ese momento era John Barnard y pensé que Michael quería probar algo completamente diferente, trabajar con gente nueva. Pero fue necesario unos meses. Luego, cuando pensaron que necesitaban el apoyo del equipo técnico de Ferrari, se pusieron en contacto conmigo nuevamente. Volviendo a tu pregunta, nunca hubiera considerado ir a Ferrari. Sin embargo, pude sentir su compromiso conmigo. También quería ser fiel a Benetton y cumplir con mi responsabilidad hacia ellos. Cuando renegocié mi contrato con Benetton a finales de 1995, sólo me interesaba la dirección del equipo. Flavio Briatore también pensó que mi visión era correcta. A medida que pasó el tiempo , tuvimos dificultades en Benetton. Empecé a cansarme. Del mismo modo, los diferentes sistemas en Ferrari desafiaron a Michael, él conocía el funcionamiento interno de Benetton y la forma en que el equipo manejaba las cosas. El modus operandi de Ferrari no le convenía. Finalmente Willi Weber (ex manager de Michael Schumacher) se puso en contacto conmigo y luego tuve una reunión con Jean Todt en Mónaco.
¿Hubo un cambio en Michael cuando se mudó a Ferrari a finales de 1996?
Brawn: “Él era el mismo. Había pasado poco más de cuatro años en Benetton, ganó dos campeonatos del mundo y necesitaba un nuevo desafío. No había nada más grande que Ferrari en ese momento. Sabía que sería extremadamente difícil, pero no lo hizo”. No me importa. Era puro Michael.” “Su creencia era que si inviertes todo lo que puedes, si trabajas duro, el éxito siempre llegará al final y nada es imposible si te das el tiempo”.
Se ha hablado mucho del “dream team” que formaste con Michael, Rory Byrne y Jean Todt. ¿Cuál era el lugar de Michael en este cuarteto?
Brawn: “No éramos sólo cuatro personas… estaban Stefano Domenicali, Nigel Stepney y otros. La fuerza de este grupo era que todos teníamos la misma mentalidad. Cuando teníamos un problema, lo resolvíamos en familia “A nadie se le ocurrió criticar públicamente o resolver problemas a través de la prensa”. Digo esto porque Ferrari estaba tan influenciado por los medios de comunicación en ese momento que el equipo estaba dirigido por seis gerentes que nunca se sentaban alrededor de una mesa para discutir cómo manejarlo. porque era sólo una cuestión de respeto. Pensábamos que debíamos lavar la ropa como familia. Michael era el vínculo importante y casi nunca criticaba al equipo. La consideración de todos era importante porque había respeto mutuo y todos eran más escuchados y tenidos en cuenta. comparta el éxito solo. Si la frase ‘equipo de ensueño’ significa algo, es esto”.
¿Cuál fue la mayor fortaleza de Michael?
Brawn: “Empecemos por la velocidad. En aquella época, mis habilidades como estratega eran a menudo elogiadas, pero la velocidad de Michael facilitaba la toma de decisiones. Hoy en día, todo el mundo habla de la era del “Hammer Time” de Lewis Hamilton. También tuvimos el “Schumi Time”. En aquel entonces, Need podía rendir cuando lo escuchaban, siendo el Gran Premio de Hungría de 1998 el mejor ejemplo. Ganó la carrera después de 18 vueltas en la clasificación. Si decimos “¡Entiendo!” “Tienes una gran ventaja cuando tienes un piloto tan confiable”, respondía. “También tenía una excelente concentración, un increíble nivel de atención al detalle y la capacidad de motivar al equipo mientras algunos pilotos en ese momento se desmayaban después de la carrera. “De alguna manera lo celebraría en el podio, estableciendo nuevos estándares en resistencia física”.
¿Ser su compañero de equipo era lo mejor y lo peor que le podía pasar a un piloto?
Brawn: “Sí, fue muy difícil. Nunca fue declarado oficialmente el número uno, pero cuando tuvimos que tomar decisiones a medias, sabíamos que esas decisiones siempre estaban a favor de Michael porque sabíamos que él haría el trabajo. No se puede culpar al equipo por eso. Siempre les dije a Eddie Irvine, Rubens Barrichello y Felipe Massa que el día que fueran más rápidos que Michael Schumacher, serían mejores pilotos que Michael Schumacher y que en situaciones de mitad y mitad las decisiones serían a su favor, pero eso nunca sucedió. Les dimos a los compañeros de Michael el mismo equipamiento y las mismas oportunidades, pero se necesitaba mucha energía para luchar contra Schumi cada fin de semana de carrera. Hoy fue como luchar contra Lewis Hamilton o Max Verstappen todos los fines de semana. No hubo ninguna ventaja por parte del vehículo. No podían ser como Michael y esto les causó una gran decepción. Aun así, todos hicieron un muy buen trabajo. Eddie Irvine casi abandonó sus ambiciones personales y se convirtió en un excelente copiloto. Rubens Barrichello, por su parte, de vez en cuando se acercaba mucho a Michael, pero se decepcionaba constantemente porque no podía superarlo. Felipe Massa, en cambio, aceptó la situación con más facilidad porque era más joven y estaba en fase de aprendizaje”.
¿Michael era más respetado que amado dentro de Ferrari?
Brawn: “Michael era muy querido y respetado. Tenía muy buenas relaciones con sus compañeros de equipo y los mecánicos. Jugaba al fútbol los jueves por la noche, conocía a todos los mecánicos por sus nombres y apodos. Les enviaba regalos en sus cumpleaños u ocasiones especiales. , y celebrar sus momentos especiales. Él estaba con el equipo”. “Solíamos organizar grandes fiestas juntos. A Michael le encantaban las celebraciones y los fanáticos y los niños lo amaban”.
Entonces, ¿la vida privada de Michael era muy diferente de su vida pública?
Brawn: “No era un hombre público. Lo hizo por necesidad, pero hizo todo lo posible para proteger su privacidad. Personalmente, sé cuándo estoy en el trabajo y cuándo no. No mezclo las cosas dos y Michael haría lo mismo cuando fuera su responsabilidad con su equipo o con la F1. Lo respetaba y trabajaba duro. Aparte de eso, sólo quería una vida tranquila. No iba a las alfombras rojas, no iba. hasta los desfiles de moda, nada que brillara le llamaba la atención, nada de eso era su mundo. Lo que hizo con Corinna fue diferente. Era un hombre normal en un ambiente que ya no era normal. No era fácil, pero a menudo desaparecía después de una carrera y no volvíamos a saber de él hasta la siguiente carrera. Por supuesto que podríamos contactarlo si fuera necesario. Él protegía su vida privada, pero también le gustaba socializar y asistir a los grandes eventos de mi vida, y yo iba a la suya. Tenía una vida feliz fuera de la pista”.
¿Qué es lo que más te gustó de él?
Brawn: “Él tenía estados de ánimo como yo, pero siempre fue completamente honesto. Era alguien en quien creía, pondría mi vida en sus manos. Nunca nos decepcionó. No siempre estuvimos de acuerdo, pero él siempre fue completamente abierto y Era simplemente una buena persona.”
¿Ha cambiado a Ferrari más de lo que Ferrari le ha cambiado a él?
Brawn: “Él fue parte del proceso que cambió Ferrari. Cuando se unió a Ferrari en 1996 fue muy inconsistente después de unos años difíciles. Michael fue un elemento muy importante para estabilizar Ferrari al principio. Se opuso a una serie de cambios planeados y “Insistí en que todos intentaban construir estabilidad”. Su influencia fue muy importante en los primeros años difíciles, fue muy doloroso, pero Ferrari le debía la nueva religión que encontró en ese período, un nuevo deseo de superar grandes desafíos y hacer grandes cosas. cosas. Sin su capacidad de recuperación, habría sido mucho más difícil y habría llevado mucho más tiempo. También hay que recordar que cuando llegó a Ferrari, venía de una estructura muy bien organizada como la de Benetton, que en ese momento era muy compleja. , con una parte de la organización en Italia y la otra parte en Inglaterra era un equipo, la comunicación no era buena, había opiniones diferentes sobre el vehículo, se dio cuenta de que no era una estructura organizada y tuvo el valor de decirlo. la forma de trabajar no era la correcta. Presionó para que esta estructura estuviera más cerca del equipo de autos deportivos Sauber-Mercedes y Benetton F1. “Realmente se esforzó por lograr lo mejor”.
¿Terminó su carrera arrepentido al final de la temporada 2006?
Brawn: “Creo que estaba cansado de lo que estaba haciendo. Para mí, decidí que diez años en Maranello eran suficientes. No sabía qué quería hacer a continuación, pero sabía que quería dejar a Ferrari en la cima. . Tuvimos algunos años difíciles con los neumáticos, pero superamos el problema. 2006′ Cuando anunció su marcha a finales de año, había una sensación de cansancio por sus días en el karting. Quería irse, era el momento adecuado porque Jean Todt también había sido llamado para otras funciones en Ferrari. Stefano Domenicali iba a aceptarlo y yo iba a zarpar hacia otros horizontes”.
¿Alguna vez ha experimentado una asociación profesional de este tipo antes o después de Ferrari?
Brawn: “¡Mi respuesta es no a ambas cosas! Es muy raro que un piloto extraordinario como Michael se una con gente de todo ese nivel. Trabajé con Lewis Hamilton, otro piloto increíblemente rápido y talentoso, pero tenía un enfoque completamente diferente. Tenía una reputación deseable y era un estilo de vida de primera línea, exactamente lo contrario de la paz que Michael buscaba. Para mí, era básicamente el mismo compromiso, talento y deseo poder contribuir a ganar cada uno de sus siete. campeonatos del mundo fue extraordinario”.
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