Carlos Sainz y Ferrari: Las 5 razones que llaman al éxito

Han pasado unos días tras del anuncio oficial del fichaje de Carlos Sainz por Ferrari a partir de 2021. Son muchas las opiniones diversas que se pueden escuchar, sobre todo, el por qué de esta alianza y surgen muchas preguntas al respecto. ¿Qué rol jugará en el equipo? ¿Qué aspiraciones puede tener Carlos a medio plazo? ¿Trabajarán bien él y Charles? Son solo algunas preguntas que se pueden escuchar o leer ahora mismo.

Hay muchas a las cuales, por naturaleza o afinidad, queremos responder positivamente, y por tanto, que el peso caiga en favor del español. No obstante, sería dejarse llevar por los fanatismos de este fichaje, es por ello que hay que analizar y valorar los aspectos por lo cuales Ferrari lo ha elegido.

PILOTO DE CALIDAD

Si repasamos las temporadas pasadas, desde su debut en Toro Rosso, pasando por Renault, hasta llegar a McLaren y la temporada 2019, debemos reconocer que Carlos es un luchador nato. Lo que más ha puesto en énfasis la calidad del español durante la última temporada, con grandes carreras como Brasil, saliendo último, pero logrando su primer podio en sus 102 carreras disputadas. También habría que remarcar el Gran Premio de Abu Dhabi, donde se afianzó a la 6ª posición en la clasificación general, gracias al adelantamiento a Nico Hülkenberg en la última vuelta.

PLUS PARA LA IMAGEN CORPORATIVA

Carlos, una vez fuera del cockpit, es un valor añadido al equipo debido a su carácter accesible, tanto con los fans y los patrocinadores, comunicativo, entregado al equipo e incluso habla italiano. Para muchos, el detalle de hablar en italiano, puede pasar desapercibido, no obstante, es algo muy valorado en la Scuderia. Ferrari, como bien se sabe, es una escudería un tanto a la “vieja escuela”, donde cada detalle cuenta. El piloto español debe integrarse bien en la familia rossa, al igual que lo debe hacer con los tifosi. Lo que no hay duda es que Carlos tiene lo necesario para llegar a ello.

PILOTO MUY RÁPIDO/ LA LLUVIA NO LE ASUSTA

No deben de pasar desapercibidos los pilotos con los que se ha medido Carlos Sainz desde su llegada a la Fórmula 1. En 2015 y 2016 tuvo que rendir ante Max Verstappen, y al cual le mantuvo el pulso constantemente, antes del ascenso a Red Bull. Salvo 2018, donde le costó un poco más contra Nico Hülkenberg, se puede llegar a la conclusión de que estamos ante un piloto muy rápido.

La lluvia es una prueba de fuego para cualquier piloto, puesto que no todos saben rendir igual de bien en mojado, como sí lo hacen en seco. Todo ello se compone de una buena comprensión de las condiciones cambiantes que se pueden dar sobre la pista. Carlos sabe hacer ésta lectura, y en condiciones adversas, sabe cómo sacar provecho. En Fórmula 1, Sainz ha realizado un total de 8 carreras en mojado, de las cuales, salvo dos de ellas, siempre ha puntuado. Una mención especial se podría hacer en Brasil 2016 o en Alemania 2019.

FACTOR ECONÓMICO

Nos atreveríamos a decir que el factor económico también ha jugado su papel. Ante la situación en la que nos encontramos, ninguna escudería es inmune ante la crisis que está dejando el COVID-19, por muy grande que sea la escudería. Ferrari, al ser una escudería más sólida, puede capear esto mejor. Su rival directo por este asiento fue Daniel Ricciardo, que viendo su sueldo en Renault, podía ser un hecho que pediría incluso más. Sinceramente, la apuesta real de Ferrari es Leclerc, por tanto, ¿por qué pagar “el segundo asiento” a precio de campeón?

Factores a un lado, lo que si debemos de reconocer, que ha sido un paso muy hábil por parte de Sainz. Paso hábil al igual que trabajado, puesto que si se mira al pasado, sus padrinos en Red Bull prefirieron a otros en vez de él. Carlos se encuentra ante una gran oportunidad de seguir creciendo, quizá derivada de la retirada de Fernando Alonso a finales de 2018, donde Carlos ocupó su asiento y el cual ha sabido hacer valer. Oportunidad que da motivos para encarar el futuro del automovilismo español con un sabor más dulce que amargo.