La escudería Racing Point se agrega a los equipos que ya consiguieron homologar el chasis que utilizarán durante la temporada 2020 de la máxima categoría. Luego de haber aprobado los ‘crash test’ que la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) determina para poder rodar con el monoplaza en pista.
La escudería de Lawrence Stroll, consiguió pasarlos satisfactoriamente y ya puede seguir trabajando en el desarrollo de un monoplaza con el que esperan poder mejorar los resultados conseguidos hasta la fecha. Las pruebas de impacto se llevaron a cabo durante la semana pasada en el Centro de Impacto Cranfield en Bedfordshire, Inglaterra.
Estas han sido pasadas satisfactoriamente y a diferencia de uno de sus principales rivales, Alfa Romeo, su chasis aguanta las pruebas de choque y esfuerzo que pide la Federación Internacional de Automovilismo para que puedan competir con el monoplaza en la Fórmula 1 y en concreto, en la temporada 2020 de la categoría reina.
Este presumible RP20 debería ser el salto definitivo que dará Racing Point, tras una temporada de transición completada en 2019, tras pasar de dueños la estructura y dejar atrás de una vez por todas la denominación Force India y centrarse en las de Racing Point. Lawrence Stroll, nuevo dueño del equipo, ha invertido grandes cantidades de dinero para mejorar las instalaciones y recursos del equipo, algo que esperan poder aprovechar durante la temporada 2020 de la Fórmula 1.
Cabe destacar que en el 2018, aún bajo el nombre Force India, la escudería entró en concurso de acreedores y fue adquirida por Lawrence Stroll, quien cambió su denominación a Racing Point. La situación vivida influyó en el desarrollo del coche del 2019, tal y como reconocieron en pretemporada desde el equipo. Precisamente, finalizaron el año pasado en la séptima plaza del Mundial de Constructores.
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